Es una fragancia para mujer que encapsula la esencia y el espíritu de la icónica diseñadora Coco Chanel.
Evocando la elegancia, la audacia y la feminidad que la caracterizaban. Su nombre, "411", es un número simbólico que representa la conexión entre el pasado y el presente, recordando a Coco Chanel y su legado eterno.
La fragancia se compone de una cautivadora mezcla de aromas, comenzando con notas de salida frescas y radiantes de bergamota y mandarina, que despiertan los sentidos y preparan el escenario para la evolución de la fragancia.
En el corazón de la fragancia, descubrimos una cascada de flores elegantes y seductoras, como el jazmín, el iris y el nardo, que aportan un toque de feminidad y sensualidad a la composición.
Finalmente, la fragancia se asienta en una base amaderada y cremosa, con notas de sándalo y vainilla que proporcionan calidez y profundidad a la fragancia. Estas notas de fondo se combinan con la suavidad del almizcle, que aporta un toque de sensualidad y misterio.
En cuanto a su presentación, el frasco sigue el diseño atemporal y elegante de Chanel, con líneas puras y minimalistas que evocan la sofisticación y la modernidad. El color dorado del frasco aporta un toque de lujo y glamour.
Es una fragancia atemporal y cautivadora, perfecta para las mujeres que desean destacar con sofisticación y feminidad. Con cada rociada, esta fragancia evoca los recuerdos de Coco Chanel, recordándonos su legado eterno y su impacto en el mundo de la moda.
Evocando la elegancia, la audacia y la feminidad que la caracterizaban. Su nombre, "411", es un número simbólico que representa la conexión entre el pasado y el presente, recordando a Coco Chanel y su legado eterno.
La fragancia se compone de una cautivadora mezcla de aromas, comenzando con notas de salida frescas y radiantes de bergamota y mandarina, que despiertan los sentidos y preparan el escenario para la evolución de la fragancia.
En el corazón de la fragancia, descubrimos una cascada de flores elegantes y seductoras, como el jazmín, el iris y el nardo, que aportan un toque de feminidad y sensualidad a la composición.
Finalmente, la fragancia se asienta en una base amaderada y cremosa, con notas de sándalo y vainilla que proporcionan calidez y profundidad a la fragancia. Estas notas de fondo se combinan con la suavidad del almizcle, que aporta un toque de sensualidad y misterio.
En cuanto a su presentación, el frasco sigue el diseño atemporal y elegante de Chanel, con líneas puras y minimalistas que evocan la sofisticación y la modernidad. El color dorado del frasco aporta un toque de lujo y glamour.
Es una fragancia atemporal y cautivadora, perfecta para las mujeres que desean destacar con sofisticación y feminidad. Con cada rociada, esta fragancia evoca los recuerdos de Coco Chanel, recordándonos su legado eterno y su impacto en el mundo de la moda.
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Es una fragancia para mujer que encapsula la esencia y el espíritu de la icónica diseñadora Coco Chanel.
Evocando la elegancia, la audacia y la feminidad que la caracterizaban. Su nombre, "411", es un número simbólico que representa la conexión entre el pasado y el presente, recordando a Coco Chanel y su legado eterno.
La fragancia se compone de una cautivadora mezcla de aromas, comenzando con notas de salida frescas y radiantes de bergamota y mandarina, que despiertan los sentidos y preparan el escenario para la evolución de la fragancia.
En el corazón de la fragancia, descubrimos una cascada de flores elegantes y seductoras, como el jazmín, el iris y el nardo, que aportan un toque de feminidad y sensualidad a la composición.
Finalmente, la fragancia se asienta en una base amaderada y cremosa, con notas de sándalo y vainilla que proporcionan calidez y profundidad a la fragancia. Estas notas de fondo se combinan con la suavidad del almizcle, que aporta un toque de sensualidad y misterio.
En cuanto a su presentación, el frasco sigue el diseño atemporal y elegante de Chanel, con líneas puras y minimalistas que evocan la sofisticación y la modernidad. El color dorado del frasco aporta un toque de lujo y glamour.
Es una fragancia atemporal y cautivadora, perfecta para las mujeres que desean destacar con sofisticación y feminidad. Con cada rociada, esta fragancia evoca los recuerdos de Coco Chanel, recordándonos su legado eterno y su impacto en el mundo de la moda.
Evocando la elegancia, la audacia y la feminidad que la caracterizaban. Su nombre, "411", es un número simbólico que representa la conexión entre el pasado y el presente, recordando a Coco Chanel y su legado eterno.
La fragancia se compone de una cautivadora mezcla de aromas, comenzando con notas de salida frescas y radiantes de bergamota y mandarina, que despiertan los sentidos y preparan el escenario para la evolución de la fragancia.
En el corazón de la fragancia, descubrimos una cascada de flores elegantes y seductoras, como el jazmín, el iris y el nardo, que aportan un toque de feminidad y sensualidad a la composición.
Finalmente, la fragancia se asienta en una base amaderada y cremosa, con notas de sándalo y vainilla que proporcionan calidez y profundidad a la fragancia. Estas notas de fondo se combinan con la suavidad del almizcle, que aporta un toque de sensualidad y misterio.
En cuanto a su presentación, el frasco sigue el diseño atemporal y elegante de Chanel, con líneas puras y minimalistas que evocan la sofisticación y la modernidad. El color dorado del frasco aporta un toque de lujo y glamour.
Es una fragancia atemporal y cautivadora, perfecta para las mujeres que desean destacar con sofisticación y feminidad. Con cada rociada, esta fragancia evoca los recuerdos de Coco Chanel, recordándonos su legado eterno y su impacto en el mundo de la moda.